“Lo debemos recordar como un colaborador intenso y activo de la cultura saladillense”, dijo Carlos Gorosito. “Formó musicalmente a muchos jóvenes y en cada uno de ellos hoy tenemos su legado. Lo vamos a extrañar”, destacó el intendente Salomón
A través de un decreto de honores y sentidas palabras, fueron despedidos este lunes por la mañana en Saladillo, los restos del maestro Oscar Domínguez.

El cortejo fúnebre se detuvo frente al Palacio Municipal, luego del responso realizado en la Parroquia Nuestra Señora de la Asunción. Hasta allí se acercaron familiares y amigos del querido músico y compositor saladillense nacido en Las Heras, además de autoridades municipales.
Luego de emotivos mensajes a cargo del ex intendente Carlos Gorosito y del mandatario José Luis Salomón, músicos de la Agrupación Bandoneones Saladillo y la pianista Mabel Iocco, integrante del Quinteto La Cuarentena, despidieron a Oscar con tres tangos: “La Cumparsita”, “Responso” y finalmente el tema que Domínguez le dedicó a Saladillo en la voz del recordado “Pety” López.
Gorosito señaló que la muerte de Oscar Domínguez representa no sólo una pérdida para sus seres queridos, sino para la comunidad. “Con él, se va un pedazo de Saladillo”, expresó.
“Fue un gran hijo adoptivo de Saladillo. Se enamoró de esta ciudad y formó una gran familia. Saladillo también se enamoró de Oscar Domínguez”, agregó.

“Le puso su impronta a Saladillo desde el punto de vista cultural, a través del tango y de un instrumento que supo manejar como nadie: el bandoneón”, reconoció.
“Formó la Agrupación Bandoneones de Saladillo y al poco tiempo la transformó en embajadora de nuestra ciudad. Realmente, nos enorgulleció. Lo de Oscar es inigualable”, enfatizó Gorosito.
“Lo debemos recordar como un colaborador intenso y activo de la cultura saladillense. Recuerdo que, a principios del nuevo milenio, viajé a recibir una distinción a España y en la localidad de Alcantarilla vimos que había un festival de tango. Es por eso que se nos ocurrió hacer algo igual en Saladillo y Oscar Domínguez estuvo entre los que lideró ese proyecto, para rescatar la música ciudadana”, evocó.

“Aníbal Troilo fue el Bandoneón Mayor de Buenos Aires y Oscar Domínguez fue el Bandoneón Mayor de Saladillo. Se ha ido físicamente, pero seguirá estando entre todos. Quedará en la memoria de cada uno nosotros”, completó.
El intendente José Luis Salomón, por su parte, expresó que es un día muy triste, pero si hay algo que caracterizaba a Oscar Domínguez era la alegría, la felicidad y la bondad, porque era una persona extremadamente generosa.

“Oscar se hacía notar y era incapaz de manifestar su malhumor. Tenía inconvenientes como todos, pero en el encuentro él siempre te relacionaba con lo más lindo: la música. Formó musicalmente a muchos jóvenes y en cada uno de ellos hoy tenemos su legado”, dijo.
“El Papa Francisco, que se nos fue hace una semana, nos recordó que la muerte es de todos. Y esas partidas pueden ser de dos formas: algunos pasan intrascendentes por la tierra y otros quedan en la memoria para siempre. Oscar, precisamente, es de esas personas. Lo vamos a extrañar, porque es irremplazable. Ojalá Dios le de la paz y el descanso eterno que merece”, finalizó.