“En Saladillo, como sucede en todos los cuarteles, hay una linda camaradería. A mí siempre me gusta hablar de la hermandad bomberil. La parte humana es re-importante y eso hace que uno sienta orgullo. Ser bombero es algo que volvería a elegir un y diez veces más”, expresó

Ser bombero voluntario es una vocación. Así lo entiende Emmanuel Nanni, uno de los tantos integrantes del Cuerpo Activo de Saladillo que hoy, 2 de junio, celebra su día.

Su primera conexión con Bomberos Voluntarios de Saladillo se produjo el 25 de mayo de 1998, a los 12 años, cuando se incorporó a la Banda como trompetista. Tiempo después, más precisamente el 15 de agosto de 2021, a los 15, con la venia del comandante Jorge Greco, se sumó como cadete al Cuerpo Activo.

Tras rendir exitosamente los exámenes teóricos y prácticos, el 12 de diciembre de 2003, con 18 ya cumplidos, y egresado de la gloriosa Escuela Técnica de Saladillo, recibió el alta como bombero voluntario.

Esta incorporación no le impidió seguir formándose profesionalmente. De hecho, en 2004 inició una carrera universitaria en Olavarría y pudo llevarla a cabo sin mayores complicaciones hasta recibirse de Ingeniero Electromecánico.

En su familia, no es el primero ni el único. Su tío Mario Mulatero también integró las filas del Cuerpo Activo en Saladillo hasta que se mudó a Lanús Oeste y allí se jubiló como bombero.

“Llevo 21 años de servicio y cada día que pasa me siento más orgulloso de pertenecer a esta institución. Bomberos es una pasión”, enfatizó Emmanuel, que en paralelo a su actividad como bombero continúa integrando la Banda.

Su bautismo de fuego fue durante una calurosa jornada de verano, con motivo de un incendio de pastos. Y a los pocos días, el 28 de enero de 2004, acudió al primer siniestro vial ocurrido en la zona de La Gallareta.

“La hermandad bomberil”

Si bien trabaja en una empresa propia, y no tiene mayores dificultades a la hora de salir hacia un siniestro, muchas veces Emmanuel tiene que dejar sus ocupaciones personales de lado para acudir a una emergencia.

“No es fácil, pero es más importante el servicio. Para eso uno elige ser bombero, y es fundamental el apoyo de la familia y de los amigos, que son quienes están en las buenas y en las malas. Muchas veces uno tiene que sacrificar cenas, cumpleaños, y reuniones con familiares y amigos, en cumplimiento del deber. A todo esto, se suman las capacitaciones y las tareas permanentes en el cuartel”, indicó.

Emmanuel aseguró que es un respaldo enorme que Bomberos de Saladillo esté excelentemente equipado, con material y tecnología de última generación. “Eso hace que uno se sienta seguro, toda vez que sale hacia un siniestro. Por suerte, en los últimos años crecimos muchísimo, gracias al apoyo de la comunidad”, remarcó.

Así como el cuartel se aggiornara y se moderniza, también es importante que el personal esté altamente capacitado. En ese sentido, los integrantes del Cuerpo Activo no escatiman esfuerzos. “Siempre nos estamos formando, para saber qué hacer y cómo actuar en determinadas circunstancias”, señaló Emmanuel, y adelantó que dentro de unos días se capacitarán en lo que respecta a rescate en ascensores, ya que en Saladillo hay muchos edificios en altura.

Otro tema fundamental es la psicología de la emergencia, que ayuda a los bomberos a comprender las reacciones emocionales de las víctimas y a desarrollar habilidades para contener las crisis.

“Cuando ocurren fatalidades, normalmente el jefe de grupo reúne a la dotación y dialogamos sobre lo sucedido, porque a todos, de una manera u otra, nos impacta emocionalmente. Antes que nada, somos personas, seres que sentimos como cualquier otro. En fin, siempre hay que estar preparado, también desde lo psicológico”, destacó.

Para Emmanuel, ser parte de Bomberos no es algo más en su vida: “Me emociona ser parte de este equipo. En Saladillo, como sucede en todos los cuarteles, hay una linda camaradería. A mí siempre me gusta hablar de la hermandad bomberil. La parte humana es re-importante y eso hace que uno sienta orgullo. Ser bombero es algo que volvería a elegir un y diez veces más.”