Ochenta de ellos estarán distribuidos en el cuadrante de Sanguinetti, Yrigoyen, vías del ferrocarril y Roigt, y los 20 restantes en nuevos desarrollos inmobiliarios, como los barrios Don Adolfo y La Tacuara

Con el fin de continuar adelante con la reconversión del sistema de recolección de residuos en Saladillo, el Municipio presentó este jueves los 100 nuevos contendedores plásticos con tapa de 1100 litros de capacidad cada uno.

Ochenta de ellos estarán distribuidos en el cuadrante de Sanguinetti, Yrigoyen, vías del ferrocarril y Roigt, lindante al barrio Procrear, y los 20 restantes en nuevos desarrollos inmobiliarios, como los barrios Don Adolfo y La Tacuara (Rivadavia sur).

El director de Servicios Urbanos, Juan Altamira, explicó que colocarán uno por esquina para que los vecinos los tengan a pocos metros de sus casas para depositar las bolsitas de residuos domiciliarios.

Al menos dos veces por semana, el Municipio pasará con sus unidades para descargarlos. Cabe destacar que Servicios Urbanos cuenta con cuatro camiones que poseen el kit de levantacontenedores.

De esta manera, el Municipio pasará de tener 170 a 270 recipientes con tapa en diferentes sectores de la planta urbana.

“Actualmente, tenemos varios barrios con este sistema y los resultados son muy buenos, tal como sucede en la localidad de Saladillo Norte en su totalidad. La idea es seguir ampliándolo, apuntando a tener en el futuro el 100% de la ciudad con contenedores”, destacó la subsecretaria de Obras Públicas, Anabella Fasano.

El secretario de Hacienda, Gustavo Ramundo, precisó que la inversión orilló los 47.200.000 pesos, dinero que salió de las arcas municipales, en base a lo que pagan los contribuyentes en concepto de tasas, y anunció que el objetivo es avanzar en los próximos dos años hasta llegar a unos 1000 contenedores para mejorar el servicio de limpieza e higiene de la ciudad.

El intendente José Luis Salomón valoró las bondades y ventajas que representa la reconversión del sistema de recolección, ya que se garantiza una mejor higiene urbana.

Además de evitar que la gente siga depositando las bolsitas en un canasto, se propicia la clasificación de residuos en origen. También, el sistema de contenedores es más seguro y eficiente para el personal que trabaja en Servicios Urbanos y menos complejo para las unidades. “Cuando los vecinos se acostumbran a usar los contenedores, el sistema es más beneficioso”, fundamentó.