El evento se desarrolló en el Campo de Pato La Totora con prueba de habilidad conductiva, juegos, música y sorteos

En el marco de su quinto aniversario, el Club de Motos Clásicas y Antiguas de Saladillo organizó el domingo la despedida de año con un encuentro de camaradería.

El evento se desarrolló en el Campo de Pato La Totora desde las 10, con prueba de habilidad conductiva, juegos, música y sorteos.

Creado hace cinco años por un grupo de amigos amantes de los fierros, el Club tiene sobrados y buenos motivos para celebrar este nuevo aniversario.

Después del exitoso 66° Rally Nacional desarrollado en octubre pasado en Cazón, hecho que indudablemente marcó un hito en Saladillo, la institución sigue ideando y programando actividades.

El puntapié lo dieron Osvaldo Debiasi y Gustavo Delrieu en 2018, cuando se volvió a organizar después de tantos años una carrera de regularidad de autos.

La experiencia no sólo cubrió las expectativas, sino que los entusiasmó a tal punto que al año siguiente dieron los primeros pasos de lo que, en definitiva, terminó convirtiéndose en el Club de Motos Clásicas y Antiguas.

De hecho, se toma como fecha fundacional el 25 de noviembre de 2019, día en que llevaron a cabo la primera prueba de regularidad.

Desde que se originó, el club no detuvo su marcha. Ni la pandemia de Covid lo frenó. “Es más: en esa época fuimos la institución que más actividades realizó, siempre con los cuidados y los recaudos necesarios. Organizamos un rally virtual y también una prueba de regularidad en el circuito. Al tiempo, comenzamos con los recorridos turísticos por los museos y lugares históricos del partido de Saladillo”, recordó Osvaldo “Pocho” Debiasi, presidente de la comisión.

Otra de las iniciativas importantes que se concretó en el último tiempo fue el patentamiento de vehículos antiguos en Saladillo, un camino prolongado que se inició en 2005 y que finalmente llegó a buen puerto. “Debemos reconocer que en esto nos dio una gran mano Gonzalo Gallego (Secretario de Seguridad del Municipio). Hoy ya tenemos 12 motos antiguas patentadas”, precisó.

Personería jurídica

Hasta el momento, el club figura como entidad de bien público y el próximo objetivo es lograr la personería jurídica para inscribirla como asociación civil, trámite que está llevando adelante uno de sus miembros.

La documentación legal les permitirá, entre otros beneficios, gestionar aportes, subsidios y también hacer socios para poder reunir fondos, autogestionarse y seguir organizando eventos abiertos a la comunidad.

Entre los proyectos a corto y mediano plazo, el grupo se propuso conseguir una sede/museo en la ciudad para que el público la pueda visitar los fines de semana y apreciar las máquinas en exposición.

Si bien en Saladillo son alrededor de 20 los integrantes del club, sumando los colegas de General Alvear y Lobos la cifra trepa a más de 50.

“Articulamos muy bien con las asociaciones vecinas, coordinando las fechas de los encuentros para que no se superpongan”, señaló.

De acuerdo a un registro que lleva el club, en Saladillo hay actualmente alrededor de 80 motos clásicas y antiguas muy bien conservadas, pero no todos sus propietarios las usan o participan de los encuentros. La máquina más antigua data de 1945 y constituye una verdadera joya.

“No es fácil mantener un vehículo de estas características, sobre todo por los repuestos. Generalmente lo que se consigue en el mercado son réplicas de los originales. El problema que tenemos en Saladillo es que no contamos con mecánicos que se dediquen a estas motos y es muy costoso llevarlas a otra ciudad para arreglarlas”, comentó.

“Así y todo, avanzamos igual porque, como dije, lo que nos moviliza es el sentimiento”, añadió Debiasi.

“Cada vez que nos juntamos, todos hablamos el mismo idioma y la pasamos muy bien. Muchos se asombran por lo que hacemos y yo lo resumo en una sola palabra: pasión. Tranquilamente podría vender las motos viejas que tengo, comprarme una 0km y no hacerme más problemas, pero es más fuerte que uno. Es un mundo que nos apasiona y realmente cada actividad que organizamos la disfrutamos.”