Por Carlos Gorosito – Ex Intendente de Saladillo
Un informe de la UNESCO confirma que el periodismo de calidad es esencial para la democracia, la rendición de cuentas y la participación cívica.
“Sabemos que el periodismo es importante para la democracia, para la rendición de cuentas, para la sociedad, y que es un bien público, y siento que los periodistas lo han dicho por años”, dijo Anya Schiffrin, una de las autoras del informe.
Guilherme Canela, jefe de la sección de Libertad de Expresión y Seguridad de Periodistas de la Unesco, dijo: “Narrativas como ‘toda la prensa es corrupta’, o toda la ‘prensa es fake news’, o que ‘toda la prensa es asociada con las élites poderosas’. Esas narrativas terminan llegando a una consecuencia común, que es este descrédito ante los ojos del conjunto de la población, de que el periodismo tiene una función fundamental en la maquinaria de la democracia”.
Y agregó: “Es un derecho individual de todos y todas, y al mismo tiempo es un derecho colectivo de nuestra sociedad” y que “cuando hay un ataque al periodismo, tenemos que encontrar las formas de hacer que el conjunto de la población entienda que este ataque al fin del día es un ataque a la sociedad”.
El informe de la UNESCO también cita la investigación del economista indio de la etnia bengalí, Amartya Sen, que en “El problema de la comida: teoría y política” encontró que una de las razones por las que India no tuvo grandes hambrunas, como las de China después del Gran Salto Adelante, es porque la prensa funcionó como un sistema de alerta temprana y como una fuente de presión para que el Gobierno atendiera las necesidades de la ciudadanía.
No cabe duda de que la prensa libre juega un rol fundamental en todas las sociedades y contribuye al fortalecimiento de la democracia. Por eso, en estos tiempos, resulta preocupante el ataque que nuestro Presidente hace al periodismo que quedó graficado en esta expresión: “No odiamos lo suficiente a los periodistas”. Una muestra acabada de intolerancia.
La expresión del Presidente alarmó al periodista Carlos Pagni, que fue apuntado por el Presidente y reflexionó lo siguiente: “Una de las preguntas que uno podría plantearse es: una vez que odiamos lo suficiente, ¿qué sigue al odio? ¿Qué le hacemos a aquellos a los que ya odiamos lo suficiente?”
La frase que cito a continuación fue publicada por el diario El Mundo de España: “Lo de odiar ‘lo suficiente’ a los periodistas ya lo utilizó anteriormente Donald Trump al que Milei idolatra y copia siempre que le sea posible, aunque con una diferencia clave: el presidente estadounidense critica destructivamente a la prensa local, pero da entrevistas a medios muy críticos con él, como pueden ser The Atlantic o la NBC. Milei sólo habla en las redes y para un reducido grupo de periodistas elegidos”.
He citado lo que escribió Sebastián Fest en el diario El Mundo (España) para que nadie interprete que es una opinión sesgada, dado que me estoy refiriendo a nuestro Presidente y estoy en las antípodas de su pensamiento.
Este sábado 7 de junio se conmemoró el Día del Periodista en la Argentina. Así se lo estableció en un Congreso Nacional de Periodistas realizado el 25 de mayo de 1938 en Córdoba, en honor a la aparición del primer número de “La Gazeta de Buenos Ayres”.
Ese mismo día, hace 215 años, la creación de “La Gaceta” fue impulsada por Mariano Moreno, numen preclaro de la Revolución de Mayo para difundir las ideas y las actividades del Movimiento de Mayo.
Va de suyo que cada periodista de opinión tiene sus subjetividades al opinar sobre los más diversos temas, porque los seres humanos somos sujetos y no objetos y, por lo tanto, tenemos distintas miradas y posiciones ideológicas.
Al mismo tiempo, es igualmente cierto que las empresas y los grupos periodísticos representan intereses políticos y económicos y los reflejan en los medios de los cuales son propietarios.
Pero es la esencia de la democracia respetar la pluralidad de ideas y garantizar el libre ejercicio del periodismo. En el mundo y en nuestro país, muchos y muchas periodistas han ofrendado su vida para cumplir con la noble misión de informar y opinar sobre los hechos que a los sectores dominantes le molestan que lo hagan ya sean gobiernos dictatoriales o despóticos o grupos económicos sin escrúpulos.
Debemos sellar nuestro permanente compromiso de defender bajo cualquier circunstancia la libertad de expresión, la libertad de prensa, porque como ha dicho Albert Camus: “Una prensa libre puede ser buena o mala, pero sin libertad, la prensa nunca será otra cosa que mala”.
Siempre he dicho y hoy lo reitero una vez que el periodismo es una profesión que compromete a quien la ejerce a la búsqueda permanente de la verdad, la libertad, la democracia y la dignidad del hombre libre.
A los periodistas libres de nuestra Argentina el reconocimiento a su labor diaria y a los periodistas saladillenses también el reconocimiento por informarnos sobre los acontecimientos de nuestra ciudad, por opinar sobre los mismos y por posibilitar también que nuestras opiniones y pensamientos tengan difusión. En lo personal, les agradezco la difusión de mis ideas, pensamientos y actividades.
Ya lo dijo el siempre recordado Rodolfo Walsh: “El periodismo es libre o es una farsa”.
